Diabetólogos y endocrinólogos temen una escalada en los cuadros de esta enfermedad, sobre todo en niños menores de 12 años, con causas distintas. Los tratamientos involucran a la familia, los expertos recomiendan crear hábitos de alimentación, un plan de ejercicio y control de peso sostenido en el tiempo.
La idea de salud y vida rebosantes, entre los niños y adolescentes, puede alterarse con la posibilidad del ´debut diabético´. Una enfermedad silenciosa que crece en el mundo por la falta de hábitos en la alimentación, con repercusión en el sistema inmunológico.
Se entiende por debut a la primera vez que una persona acude a la emergencia presentando un cuadro clínico compatible con diabetes mellitus descompensada, el cual es especialmente dramático en los pacientes pediátricos.
Aunque la diabetes es conocida desde la antigüedad y son miles los estudios que se han llevado a cabo para comprenderla, su patogenia no ha sido aclarada totalmente. Durante los últimos 45 años los investigadores decidieron asumir un hecho fundamental que ha colaborado enormemente en el entendimiento de esta condición.
Son tres las fases en las que se puede dividir el aparecimiento del 'debut diabético':
Predisposición genética o herencia.
Evento desencadenante o gatillo de la destrucción de las células beta del páncreas.
Anormalidades autoinmunes.
La Dra. Alba González, médica internista, con subespecialidad en Diabetología, ratificó el temor por el incremento del ´debut diabético´. Dijo que, en su consultorio, ubicado al norte de Quito-Ecuador, atiende casos que se presentan repentinamente y que son confirmados mediante una profunda evaluación y el soporte de varios exámenes especializados. Una noticia que toma por sorpresa al hogar, pues se trata de una situación que nunca la sospecharon. Si el paciente es un niño, “el cambio no solo le afecta a él, sino que –en gran parte– el tratamiento recae sobre su familia”, enfatizó la especialista.
La Dra. González refiere que en los chicos se debe realizar exámenes inmunológicos que confirmen estos resultados. Exhorta que es importante la actitud de los padres frente a esta afección ya que deben infundir confianza y seguridad en sus hijos.
La experta explicó que:
· Los agentes disparadores suelen ser esos factores ambientales que ejercen su acción sobre la persona, genéticamente vulnerable, para que se inicie la destrucción de las células beta del páncreas. Previo al ‘debut diabético’, debe ocurrir un evento desencadenante.
· Las personas con diabetes mellitus tipo 1 pueden presentar alteraciones inmunológicas fuertemente asociadas con el desarrollo de la diabetes. Se han detectado anticuerpos contra la insulina, anticuerpos contra las células beta, que son las productoras de la hormona insulina en pacientes estudiados, previo a su ‘debut diabético’.
· Al comenzar la destrucción de las células beta, el ‘debut diabético’ está cerca. Sin embargo, los síntomas reales no aparecen hasta que se elimina cerca de un 75% de la producción de insulina.
En la sintomatología del ´debut diabético´ aparece, especialmente entre los más jóvenes, la tendencia a la cetoacidosis (cuando el hígado convierte la grasa en un impulsor llamado cetona, que hace que la sangre se vuelva ácida).
La cetoacidosis diabética conforma un escenario agudo de la diabetes y es la principal causa de hospitalización. Es el panorama más frecuente en el ‘debut diabético’. Las principales manifestaciones clínicas de este cuadro son:
Sequedad de la boca.
Deshidratación moderada o severa.
Incremento de la sed (polidipsia), de la frecuencia al orinar (poliuria), avidez por la comida –principalmente– de dulces (polifagia).
Náuseas, vómitos y dolor abdominal.
Hiperventilación o respiración de Kussmaul.
Alteración del estado de conciencia.
La Dra. González informó que el objetivo en la atención del ‘debut diabético’ es conseguir un control glucémico lo más próximo a la normalidad, para evitar tanto las complicaciones agudas como las crónicas. Todos los estudios involucrados apoyan la necesidad de realizar un tratamiento intensivo de la diabetes infantil desde el inicio de la enfermedad. Este consiste en la administración de múltiples dosis de insulina con requerimientos de insulina basal de acción lenta para evitar la hiperglucemia postpandrial (el nivel de glucosa en sangre tras la ingesta de alimentos).
Se administrarán insulinas de acción rápida antes de cada comida o mediante el sistema de infusión continua de insulina. Para complementar, es necesaria la educación al paciente y la familia, para la realización de autocontrol mediante glucemias capilares (muestra de sangre tomada de un dedo para su posterior análisis).
La asesoría médica debe acompañarse con recomendaciones puntuales, ya que el fin es mejorar la calidad de vida individual y de quienes le rodean. Por ello, la diabetóloga Alba González, remarcó que una actitud de angustia, por parte de los padres, se va a convertir en un comportamiento de sobreprotección que, generalmente, acarrea rechazo y rebeldía por parte del pequeño.
Una enfermedad crónica conlleva gran variedad de ajustes psicológicos; pero, para que exista una buena adaptación es muy importante considerar a la persona con diabetes por sus capacidades y talentos.
En la diabetes tipo 2, hay factores de riesgo en los niños, que incluyen:
Tener sobrepeso u obesidad.
Tener familiares con diabetes.
Ser afroamericano, nativo de Alaska, indio, americano, asiático americano, hispano o latino, nativo de Hawái o isleño del Pacífico.
Tener presión arterial alta.
Tener un bajo nivel de colesterol bueno (HDL) o un alto nivel de triglicéridos.
Tener un estilo de vida inactivo.
Prevención
Si está en riesgo de desarrollar diabetes, es posible que pueda evitarla o retrasarla. La mayoría de las cosas que debe hacer implican un estilo de vida más saludable. Si realiza estos cambios obtendrá beneficios en su salud. Puede reducir el riesgo de otras enfermedades, se sentirá mejor y tendrá más energía.
Los cambios son:
Perder peso y mantenerlo.
Seguir un plan de alimentación saludable.
Hacer ejercicio regularmente (mínimo 30 minutos).
Realizarse periódicamente chequeos médicos.
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